"si se emocionan, mueren..."
así reza un artículo sobre la cardiopatía de unas pobres muchachas galesas. si se emocionan, mueren.
al parecer, su corazón es tan frágil que un leve sobresalto, una brecha en su marcada monotonía podría fulminarlas en ese mismo instante antes de lo que se tarda en decir "cardiopatía"...
pero quizá no sean las únicas. existen seres sobre este mundo -con una salud cardiaca envidiable- que han elegido no sentir más. se han cansado de sufrir cada vez que respiran, de morir cada vez que eros les mira aunque sea de reojo y de morir de nuevo al extrañar sus ojos furtivos. 'morir: dormir, nada más'.
el atisbo de una posible resurreción representa una idea demasiado cristiana para el paganismo del asunto, y al fin y al cabo el ex-sintiente la deshecha al momento como impensable.
una vez sintieron su miocardio experimentar un empuje vertical hacia arriba directamente proporcional a la tragedia que se avecinaba. entonces supieron que no podrían deshacerse nunca de ese palpitar, que estaban marcados por el destino, la diosa fortuna o la putada de lo real a acompañarles en sus sueños hasta reunirse con virgilio.
"los médicos creen que enamorarse también puede ser letal".
y no podrán evitarlo. tarde o temprano morirán, y será de amor.
como tú.
como yo.
morirán y moriremos
